Autor: Burstyn Igor
CONTEXTO
Los cigarrillos electrónicos son generalmente reconocidos como una alternativa más segura a los productos de tabaco, pero hay afirmaciones conflictivas sobre hasta qué grado estos productos deberían ser preocupantes para la salud de los vapeadores. Este trabajo repasa los datos disponibles sobre la química de los aerosoles y líquidos de los cigarrillos electrónicos y compara un modelo de la exposición de los vapeadores con estándares de seguridad en el trabajo.
MÉTODOS
Se accedió a trabajos tanto en publicaciones académicas con arbitraje como trabajos informales y a más de 9.000 observaciones de diferente calidad. Las comparaciones con los estándares de exposición en el trabajo, Valor Umbral Límite (TLV), fueron realizadas bajo el presupuesto del «peor caso» sobre los contenidos químicos del aerosol y líquidos así como también en el comportamiento de los usuarios.
RESULTADOS
No hubo evidencia sobre de una potencial exposición de los usuarios del cigarrillo electrónico a contaminantes que están asociados con un riesgo de salud a un nivel que que requiera de atención si hubiese sido una exposición involuntaria en el trabajo. La gran mayoría de las exposición son inferiores al 1% del TLV . La exposición a la acroleína y formalheído son típicamente inferiores al 5% del TLV. Considerando la exposición al aerosol como una mezlca de contaminantes no mostró plausible la posibilidad de exceder la mitad del TLV. Solo la exposición a los ingredientes principales – propilenglico y glicerina – merecen atención por la naturaleza precautoria de los TLV para la exposición de hidrocarburos sin toxicidad determinada.
CONCLUSIONES
El estado actual de conocimiento sobre la química de los líquidos y aerosoles asociados con los cigarrillos electrónico indican que no hay evidencia de que el vapeo produce una exposición a los contaminantes del aerosol que no amerita preocupación según los estándares que se utilizan para garantizar la seguridad laboral. Sin embargo, el aersool generado durante el vapeo como un todo (contaminantes más los ingredientes declarados) crean una exposición personal que podría justificar el monitoreo de la salud entre los vapeadores en conjunto con la investigación para mantener cualquier efecto adverso tan bajo como sea posible razonablemente. Las exposiciones por parte de terceros es probable que sean órdenes de magnitud menores, y por lo tanto no representan ningún problema.